Las empresas con mayor número de mujeres en sus puestos de dirección obtienen mejores resultados económicos en general, así es de contundente el artículo de El País refiriéndose al estudio realizado por la organización estadounidense Catalyst. Según dicha investigación y después de analizar a las quinientas mayores empresas del mundo, aquellas compañías con un mayor porcentaje de mujeres tienen un 53% más de ROE (rentabilidad sobre los recursos propios), un 42% más de beneficios por ventas y un 66% más de retorno sobre capital invertido. En otras palabras, dinero, dinero, dinero.
Aunque el sentido común ya nos hacía suponer dichos resultados superiores siempre es de agradecer que los datos lo confirmen. Si queremos creatividad, necesitamos diversidad como hemos comentado otras veces. Los hombres y las mujeres pensamos de diferente manera (“¡viva la diferencia!” que dirían los franceses). Así pues, no aprovechar dicha diversidad es tirar por la ventana el dinero. Pero la solución no consiste en promocionar a unas mujeres y esperar a que se produzca el milagro de los ascensos y los panes, si no que hacen falta cambios muy profundos en las organizaciones y en la mentalidad de quienes las dirigen.
Está claro: El mercado va más deprisa que la capacidad de cambiar de muchas personas y estructuras organizativas. Pero como también parece claro, en una situación de mercados abiertos, aquellas empresas que sepan adaptarse estarán en mejores posiciones para ganar más dinero, como han demostrado los datos de Catalyst.
Imagen tomada de: http://www.eleconomista.es/imag/_v2/ilustraciones/economia/mujer-dinero.jpg
Las nuevas generaciones pueden tenerlo más fácil con este enfoque. Se acepta socialmente la idea de que somos más rentables. Las que pasamos de los 40 hemos tenido que luchar con las creencias hechas de hábitos, que, a su vez, se habían formado en nosotros, en gran parte “gracias” a creencias de quienes nos precedieron.
En fin, que yo siempre dije que no tenía suficiente ambición, y así es, pero muy probablemente era sólo un patrón del subconsciente para frenar mi expansión.
Un abrazo
Concha, gracias a mujeres como tú estáis ayudando a un cambio profundo y qué bueno ser capaz de identificar los frenos personales que todos, de un modo u otro, sentimos.
Y, Pedro, me uno en tu ánimo a quienes todavía conviven en esos entornos y no les es fácil el cambio.
Un abrazo
El talento es el recurso más importante para una empresa ¿Cómo puede ser lógico que todavía muchas decidan no buscarlo entre algo más de la mitad de la población?
Además de injusto, es estúpido. Me alegro que las cosas estén cambiando y que los estudios demuestren el error.
Mucho ánimo para las que todavía tienen que sobrevivir en ámbitos retógrados.
Un saludo!
Voy a ser mala. Es que las mujeres ganamos menos y así tienen más margen 🙂
Mira el caso de Anne Lauvergeon
Como siempre, Lula, brillante 🙂
Que bueno, que alguien compruebe lo que podemos hacer las Mujeres!!!!!!!!!!!